Guion: Matt Fraction Dibujo: Mark Bagley
Tinta: Mark Farmer, Mark Morales
Color: Paul Mounts y otros
Contiene Fantastic Four v4, 3 y 4 USA
precio: € 3.25
Valoración: 3 sobre 10
Citas: -"Entonces, ¿aterrizo y me lío a palos?" (La Cosa)
-"Si no me alejo de ti, serás la única cosa en la que quiera pensar" (Mr. Fantástico)
Reseña: Una vez pasada la euforia de las novedades del primer número y leídos varios episodios, uno se puede hacer mejor una idea de lo que el nuevo guionista plantea en esta serie y la verdad es que no me está gustando nada. En principio, se confirma que Fraction hablaba muy en serio cuando afirmaba que quería conseguir una serie "para todos los públicos", por lo que resulta menos compleja y oscura que la anterior etapa de Hickman. Y hay montones de incongruencias y situaciones que hacen quedar al líder de los 4 fantásticos como un estúpido y que relataremos a continuación.
Sabemos que el propósito de Richards consiste en viajar a mundos desconocidos para encontrar la cura a una enfermedad letal que avanza inexorablemente. Lo que no se entiende cómo es que se lleva a los críos a la misión más peligrosa con la excusa de no dejarlos tanto tiempo sin sus padres cuando también empieza a utilizar la máquina del tiempo para no pasar tanto tiempo alejados de la Tierra. Y luego con el primer planeta que se topa de interés, no se preocupa bajar a explorarlo con sus hijos con una imprudencia que sorprende y que lo convierte en un padre descuidado. El planeta nuevo resulta ser un señuelo de una criatura de tamaño planetario para alimentarse: lo primero que se piensa es que tiene una dieta extraña y minúscula pese a su tamaño. Cuando uno cree que ya no se puede estropear más la historia, la Cosa salta desde la nave en órbita hasta el suelo extraterrestre, sin ningún rasguño al final. ¿Y la fricción? ¿y los ojos, cómo resisten sin daño a la entrada en la atmósfera?
En la segunda historia, la familia fantástica entra en contacto con una raza alienígena que esconde un misterio: guardan con celo unas pintadas en una cueva que revelan su venida. El misterio acaba resolviéndose de la manera más disparatada y absurda. El columnista de la hoja final nos dice que esta dinámica seguirá durante un año, como pidiéndonos paciencia, y empieza a dar vueltas al tema de los títulos de la serie, porque en verdad no hay mucho que decir de una serie tan aburrida.
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