Valoración: 10 sobre 10
Reseña: Esta serie es un terreno muy fértil para cualquier guionista, pues puede ocurrir de todo al poder recurrir a la magia, la mitología, la ciencia ficción, la fantasía. El guionista se muestra ilusionado de tratar la mitología nórdica: "La secuencia en que Loba monta a la vieja Griz bajo la luna a través de un denso bosque, alejándose más y más del mundo de los humanos y comenzando a dar rienda suelta a su parte más salvaje sigue siendo mi preferida. Roman lo dio todo gráficamente con aquella jauría de lobos. Me encantan las brujas, los lobos y las brujas despiadadas de los cuentos de hadas en sus versiones primitivas, feroces y crueles antes de la patética castración disneyana que se ha impuesto a los niños. No hay más que acercarse a la mitología celta para descubrir toda la riqueza y la originalidad de un universo de leyendas, poblado por héroes extraordinarios, dioses pérfidos y criaturas fantásticas. Lo más sorprendente es que ese universo tan original no se conozca demasiado, salvo en el caso de algunos relatos, a pesar de que valga tanto la pena".
Así, Loba, la protagonista, ha sido separada mágicamente en dos versiones, una más impulsiva y salvaje y otra más inteligente y cauta. Ambas coinciden en un bosque lleno de criaturas fantásticas en una misión aparentemente imposible de arrebatar al lobo gigante Fenrir un objeto que interesa a los dioses de la mitología nórdica que manipulan a los humanos para lograr sus propósitos. Esta apabullante criatura que los propios dioses expulsaron de su reino atemorizados por su ferocidad persigue sin descanso a los invasores de su reino, es decir, a las dos versiones de Loba que pretenden recuperar algo que los dioses anhelan y que podría volver a juntarlas en una sola mujer.
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