Dibujo: Greg Capullo, Jason Fabok
Tinta: Jonathan Glapion
Color: Peter Steigerwald, FCO Plascencia
EDICIÓN ORIGINAL: Batman Annual 1, Batman 10 USA
ECC / DC Comics
Valoración: 6 sobre 10
Citas: -"Eres sólo un lunático que busca la ilusión del amor en lo único que le ha importado en su vida...el hielo." (Batman)
-"Al fin y al cabo, estoy aquí para atrapar a un muerto." (Batman)
Reseña: Admito que sólo sigo series de Batman bajo el nombre de Scott Snyder, pues se trata del único guionista actual que me inspira cierta confianza en que consiga alguna historia aceptable. Además, le respaldan dibujantes de la talla de Greg Capullo que, entre otros detalles artísticos resaltables, le confieren al protagonista una fiereza y contundencia que no se veía desde el de Frank Miller en Dark Knight. No vamos a entrar en que en su primera saga, donde se han acabado implicando todas las colecciones vinculadas al Hombre Murciélago, se reduce al protagonista del mejor detective del mundo a uno mediocre al revelar que durante muchos años ha imperado la manipulación de una organización secreta en Gotham City sin que Bruce Wayne sospechara nada, llamados El Tribunal de los Búhos. Tampoco podríamos seguir hurgando en la herida abierta en que se trata de otro guionista sin resolver la recurrente pregunta inexplicable de por qué uno de los hombres más ricos de EE. UU. no invierte en mejorar la seguridad del manicomio de Gotham para evitar que sus internos, infinitamente más peligrosos que un barbero con hipo, escapen con una facilidad pasmosa.
En efecto, mi confianza en Snyder no cae en saco roto y en este cómic se demuestra con dos historias más que aceptables. En la primera se centra en uno de los villanos clásicos del cruzado de la capa, Mr. Frío, vinculándolo en forma "residual" a la saga que causa estragos actualmente, es decir, con la de los Búhos, los cuales han usado ideas de Mr. Frío para resucitar a compañeros suyos. En cuanto este lunático se entera del éxito de esta organización secreta, tras protagonizar una espectacular fuga de Arkham Asylum, se dispone a utilizar la misma tecnología en resucitar a su amada. El autor logra jugar con la mente del lector, pues el villano ofrece su punto de vista de la situación y logra que olvidemos lo que de verdad ocurre y nos pongamos de su lado: su dramática pérdida supuestamente accidental de su madre y su dedicación obsesiva en encontrar una manera de salvar a su amada criogenizada, donde Bruce Wayne figura como un empresario sin escrúpulos que frustra los románticos objetivos del científico y que, además, le provoca un accidente que le convierte en lo que actualmente es. Sin embargo, al final se revela la auténtica verdad: la locura de este maníaco, obsesionado con el frío, que tergiversa lo que ocurre realmente.
La segunda historia se usa para avanzar más en la saga de la organización secreta de los Búhos, ya casi en las postrimerías de la misma. El peor error de esta ha sido descubrir su existencia y enfrentarse a Batman y toda su tropa, cuyas consecuencias suponen la desesperación que parece empujar a una gran parte de la cúpula de estos conspiradores al suicidio, pero al cruzado de la capa no le falla (esta vez) su olfato de detective y sospecha que hay mucho más detrás de todo esto, que no acaba la cosa en ese aparente suicidio colectivo. Sus pesquisas le llevarán a descubrir quién se encuentra detrás de todo, lo cual, pese a tratarse de un tópico para muchas historias, logrará sorprender a Batman y, seguramente, al lector.
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