Guión: Jason Aaron
Dibujo: Jefte Palo
Color: Frank Martin, Sotocolor
Panini Cómics
Contiene Incredible Hulk v4, 13 y 14 USA
Valoración: 6 sobre 10
Citas: -"Yo diría que es hora de tomar el control." (Bruce Banner)
-"¿Y si estamos malgastando nuestras vidas?" (Muertebot)
Reseña: Penúltimo número antes del fin de la etapa de Jason Aaron y no se pierde comba. La sensación que se desprende de esta etapa es que el guionista ha intentado ponerlo todo patas arriba y que esto funciona muy bien con un protagonista que constituye el sueño hecho realidad para cualquier psicoanalista ansioso de gloria. La dinámica establecida para la serie se basa en giros argumentales inesperados, aventuras muy extrañas y acción a raudales. Quizá la idea más lograda se encuentre en el cambio de tornas al conseguir que consideremos a la personalidad de Bruce Banner como la más inquietante y delirante, teniendo en cuenta que su alter ego verdoso representa sus emociones más reprimidas, se denota el mérito.
El científico reconoce que necesita a su otro yo para evitar caer en una espiral de locura muy destructiva, para mantener un mínimo de autocontrol. Por ello, procurará reconciliar ambas personalidades enfocando su odio hacia un enemigo común: aquél que los separó físicamente con cirugía radical por unos intereses oscuros de por medio. Además, se rellenarán los huecos de los últimos números con los tejemanejes de Bruce para manipular al goliat esmeralda y lograr una serie de productos que le han permitido hallar una cura para librarse de Hulk, pero no para usarla en sí mismo, sino contra su objetivo, el doctor Muerte. Sin embargo, el auténtico dictador de Latveria se encuentra en paradero desconocido y en su lugar le sustituyen un grupo de autómatas fanáticos, los Muertebots, y con ciertas inquietudes existenciales.
En el bando de Hulk, se unirá el Escuadrón Loco, grupo de asalto liderado por la lujuriosa y lunática Amanda Von Muerte, y, por su parte, los Muertebots contratarán los servicios de una empresa de especialistas en asesinar a los objetivos más difíciles. Para el gigante verde le reservarán un asesino comatoso cuya especialidad se encuentra en el único punto vulnerable de aquél, es decir, en su mente.
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