Dibujo: Salvador Espín, Shawn Moll
Tinta: Mark Irwin
Color: Guru eFX, Chris Sotomayor
Panini Cómics
Contiene Deadpool v4, 45-49.1 y What If Venom Possessed Deadpool? USA
Valoración: 1 sobre 10
Citas: -"Parece que vas a saltar del puente y suicidarte. (...) Eh, ¿te importa si miro?" (Masacre)
-"¿Sabes qué veo al mirarte? Todas las partes de mí que quiero muertas." (Masacre)
Reseña: La etapa de Joe Kelly con Masacre resultó desternillante, con especial mención al episodio nominado a Premio Harvey, en que viajaba atrás en el tiempo y desmitificaba el pasado de Spiderman. Fabian Nicieza hizo trascender al dicharachero mercenario terrorista definiéndolo más como un héroe sacrificado y atormentado. En cambio, lo que está haciendo Daniel Way no tiene nombre. Parece que no exista un guion y que esté improvisando chorradas sobre la marcha. Es como ver una peli de Adam Sandler, en que de cada cien chorradas, quizá una tiene gracia. Además, añade confusión sobre el factor curativo del personaje, creando un villano a través de trozos del cuerpo que el protagonista ha ido perdiendo y que ahora han sido unidos.
La historia consiste en Masacre persiguiendo a su malvado doble reconstruido a partir de cachos de aquél que perdió en el pasado y que pretende hacer realidad todas las barbaridades que se le ocurren. Entremedio aparece el Capitán América, que por supuesto, queda ridiculizado ante los disparates de ambos personajes. El tomo no se salva por ningún sitio. Luego tenemos una historia musical de Masacre rapeando donde repasa sus últimas aventuras con Norman Osborn y los invasores Skrull.
Y Rick Remender se desata en el What if a su cargo titulado "¿Y si Veneno hubiera poseído a Masacre?". El mercenario recibe el encargo de asesinar al Topoderoso con un arma que puede borrar la realidad. La cosa se enreda bastante y acaban Tony Stark, Masacre y el Todopoderoso de vagabundos borrachos tirados en la calle durante un tiempo. El simbionte se despega de Peter Parker y acaba unido al del parlanchín protagonista, con el que empieza una carrera absurda para sobrepasar en estima y popularidad a cualquier otro héroe o villano. Incluye otro simbionte surgido de unos rizos que pierde el primero y un Galactus que deja preñada a la novia del Todopoderoso. Vamos, un disparate tras otro sin gracia la mayoría de veces y que llega a hacer tediosa la lectura. Exactamente la misma sensación de pérdida de tiempo que las películas de Adam Sandler (sí, no me van en absoluto y aprovecho para meter cizaña en cuanto me dan vía).
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