domingo, mayo 21, 2006

Quién soy y cómo llegué a ser

Hola. Bienvenidos a este weblog especializado en críticas de cómics. En este primer mensaje, uno de los más personales de por acá, quisiera tratar tres asuntos básicamente: una presentación de este proyecto que aquí empieza, la realización de un alegato en favor de la lectura de cómics y, por último, una introducción a los primeros cómics que reseñaré sobre el dios del trueno Thor.

Este proyecto nace del deseo de "exprimir" al máximo las posibilidades de mi afición mediante el proceso de creación de una crítica, es decir, disfrutar leyendo un cómic, investigando las fuentes vinculadas al mismo, meditando los propósitos del autor y creando una ficha con sus datos y la crítica en sí.

Creo que lo más importante consiste en argüir mis razones de por qué me agrada leer cómics y no lo razonaré porque considere necesario justificar mi afición, sino para defender lo que tengo por justo mediante argumentos, ya que a lo largo de la vida de un friki sufrirá el desprecio por su afición por parte de muchos detractores. Como afirma el famoso psicólogo social y humanista alemán Erich Fromm quien abogó por un "humanismo radical o revolucionario" para liberar al actual enajenado homo consumens: "¿Y qué importa si los demás no nos entienden? Cuando nos exigen hacer sólo lo que entienden, lo que hacen ellos es tratar de imponérsenos. Si dicen que somos raros o insociables , que lo digan. Lo que les molesta, sobre todo, es nuestra libertad y nuestra valentía de ser nosotros mismos. A nadie tenemos que rendir cuentas, mientras no hagamos daño a nadie. ¡Cuántas vidas se han arruinado por esta necesidad de explicarse!, lo que suele querer decir que la explicación se entienda, esto es, se apruebe. Que juzguen nuestros actos y, por ellos, nuestras intenciones verdaderas, pero sepamos que una persona libre sólo debe rendir cuentas a sí misma, a su razón y a su conciencia, así como a las pocas personas que pueden tener justo derecho a ello.".

Mi primer argumento en pro del merecido respeto de la lectura de cómics consiste en que se trata de una forma de expresión milenaria, es decir, que nos acompaña desde los albores de la civilización. Coincido totalmente con Will Eisner, uno de los mayores innovadores del cómic en el siglo XX, cuando sostiene: "Los cómics, descritos como imágenes en secuencias que cuentan una historia, es una forma muy antigua de comunicación gráfica. Comenzaron con los jeroglíficos en Egipto y aparecieron de manera reconocible en láminas de cobre en la época medieval producidas por la iglesia católica para contar historias morales". Si bien es cierto que el cómic tal como lo conocemos hoy día se desarrolló durante el siglo XX cuando se crearon las grandes editoriales que copan el mercado, no se puede dudar que continuará adaptándose a los gustos y formatos que agradan a cada generación.

Los detractores de los cómics acusan a los aficionados de perder el tiempo, cuando existen asuntos más acuciantes, con un medio limitado, simplista e hipócrita. Creo que quienes afirman tales cosas no han leído nunca un cómic o sólo cómics de humor fácil que provoca que juzguen el resto de cómics con el mismo rasero. O bien han leído cómics de muy baja calidad solamente. En verdad existen temas que requieren una atención especial y urgente, quizá los dos más importantes serían la injusticia social y la crisis medioambiental. Respecto a esta última la situación parece bastante grave, sólo hace falta ver rigurosos documentales como Una verdad incómoda o estar atentos a los medios de comunicación.

No obstante, como un poeta dijo:"Para cada cosa hay una estación, y un tiempo para cada propósito bajo el cielo. Un tiempo para nacer, y un tiempo para morir...Un tiempo para matar y un tiempo para curar...Un tiempo para llorar y un tiempo para bailar..." y resulta muy cierto. Uno puede dedicar un tiempo a combatir las injusticias sociales que perjudica la conciencia de los que viven en sociedad o ayudar en contra del cambio climático que amenaza la continuidad de nuestra especie. Así, también hay un tiempo en que precisamos "alimento" para nuestra mente, para el esparcimiento, para la búsqueda de conocimiento que nos permita relajarnos y aprender cosas nuevas. Leer cómics es una buena opción en este sentido. Me interesan los superhéroes como metáforas de las inquietudes y pasiones de cualquier persona y sus cómics como medio para contar historias que nos emocionen, conmuevan y enseñen aspectos importantes sobre la vida. No obstante, como en todo arte, existe mucha basura ya que algunos autores se centran en el medio o "continente", en los tópicos, en la exageración y la acción, y consiguen darle mala fama al género, pues no lo utilizan como una herramienta para narrar algo interesante. Lo mismo ocurre con cualquier otro género literario: la ciencia ficción, el terror, la serie negra, etc. que resultan más interesantes en la medida que se usan como medios para explorar la complejidad del individuo y su existencia en sociedad.

Al igual que cuando vamos al cine o a una librería solemos saber distinguir una obra sin pretensiones y otra con la que podemos ganar sabiduría, el mismo criterio de calidad deberíamos aplicar a la hora de seleccionar cómics. Quiero reseñar en este weblog esos comics que pertenecen al llamado "entretenimiento inteligente", es decir, aquellos que contienen una historia original y bien narrada, cierta calidad gráfica y fomentan la reflexión o/ nos hacen más sabios y que sepan transmitir emociones.

Los primeros cómics que se reseñarán en este weblog y que, por tanto, cumplen los requisitos de calidad anteriormente comentados, pertenecen al dios Thor, es decir, a un personaje del Universo Marvel cuyos orígenes y, habitualmente, sus historias se inspiran directamente de la mitología, en concreto, de la de los países nordeuropeos.

Estos comics seleccionados de Thor que coinciden con cierto éxito de crítica y público, ofrecen abundante información sobre ese apasionante tema que es la mitología. No olvidemos, como indica el psicólogo suizo Carl Gustav Jung que "la misión de los símbolos religiosos es dar sentido a la vida del hombre" y que "la figura del héroe es un arquetipo que ha existido desde tiempos inmemoriales". En efecto, los mitos procuraron proporcionar un significado a los principales eventos de la vida del ser humano, desde el nacimiento, la muerte, la creación y el fin del universo, las estaciones...

Me gusta como el autodefinido como "místico", "trascendentalista" y "filósofo de la naturaleza" Thoreau describe la mitología: "Esta entrañable reiteración de las más antiguas expresiones de la verdad por una posteridad contenta con retocar ligera y religiosamente el viejo material, es la prueba más concluyente de una humanidad común".

Puede que algunas personas subestimen la mitología reduciéndola a un término para designar religiones antiguas producto de la fantasía, pero se ha de tener en cuenta que, según el ensayista Joseph Campbell:"Todo mito, intencionada o inintecionadamente, es psicológicamente simbólico" y que "por tanto, hay que interpretar su narrativa y sus imágenes como metáforas, no de un modo literal." Algunos psicólogos y escritores sobre el tema conceden a los mitos del héroe un poder de fascinación y de revelación similar al de los sueños que, en cierta manera, conectan con nuestra psique profunda y pueden ayudar a conocernos mejor a nosotros mismos.

Jack Kirby, uno de los artistas más relevantes de la historia del cómic, llega más lejos estableciendo un puente directo entre los antiguos mitos y los cómics de superhéroes:"Las historias de superhéroes son el equivalente de hoy de las leyendas de los dioses. Son una forma de trascendernos. Una forma de entretenernos. Realmente no existen cosas tales como dioses, pero están en nuestras propias interpretaciones de estas cosas. Ellos son nosotros. No son sólo individuos; son representaciones de la humanidad. Los dioses son más grandes que nosotros porque son todos nosotros. Naturalmente, siendo todos nosotros, tienen que ser presentados de una manera poderosa. Los dioses representan nuestro potencial para el bien y para el mal. Hacen a gran escala lo que nosotros mismos somos capaces de hacer, para lo bueno y para lo malo".

En la sección de comentarios, procuraré aportar más datos sobre las diversas cuestiones tratadas y también allí serán bien recibidas vuestras críticas, discrepancias o cualesquiera comentarios.

¿Os apetece acompañarme? Pues esta es mi historia...