jueves, enero 01, 2015

Robocop versus The Terminator

Guión: Frank Miller 

Dibujo: Walter Simonson

Color: Steve Oliff



Contiene Robocop versus The Terminator nº 1 a 4

Precio: 15,95 euros

Valoración: 7 sobre 10


Citas: -"El creador una vez más les dispara. Es una locura. ¿Es que no sabe que ellos son sus hijos?" (Terminator)

-"La paz llegará. Esta es la última batalla" (Terminator)

-"...calla y muere" (Robocop)


Reseña: Hubo un tiempo en que todo lo que tocaban Frank Miller y Walter Simonson se convertìa en oro, en clásicos instantáneos: Thor, Daredevil, Batman...pero ese tiempo pasó y ni siquiera ambos juntos consiguen esa magia. No obstante, esta obra se encuentra más cerca de los buenos tiempos que de los peores, por lo que el resultado final se acepta como notable. Algunas cosas chirrían, aparecen forzadas, como lo de que una de las protagonistas se construya una potente arma con instrumentos rudimentarios en un callejón  capaz de destruir a Robocop de un tiro (¿por qué los otros viajeros temporales no hicieron lo mismo?), o cuando se les arroga comportamientos muy humanos a los Terminator alzando el puño en señal de victoria.

En todas las entrevistas este guionista habla de cómo coartaron sus ideas durante su implicación en las películas del policía robótico: “Vine de Robocop 2 convencido de que era el equivalente a construir una boca de incendios y tener a los perros orinando encima. Juré que nunca volvería a tocar el cine". Y de todas esas ideas que no le dejaron meter en los guiones, han salido multitud de cómics dedicados a Robocop y un cruce con el otro robot más famoso del cine, se convertiría de inmediato en ventas aseguradas. En el libro "En primera persona", Frank Miller comentaba: "Fue idea de Mike Richardson, fue culpa suya. Me hizo una oferta irresistible. Por un lado, podía usar ideas que no pude llevar a cabo en Robocop 2 y 3, y por el otro, podría colaborar con Walter Simonson. La visualización que Walter tiene de todos los personajes es soberbia, muy dramática y dinámica. No es uno de esos cómics que  parecen dibujados a base de copiar fotos". El dibujante es un apasionado de la ciencia ficción que se mete en todos los berenjenales de este tipo que puede: "Leía un montón de fantasía y de ciencia ficción desde mediados de los 60 hasta mediados de los 70, y eso se nota en mucho de mi trabajo", y cuando se le pregunta cuáles fueron sus obras preferidas, contesta: "Estoy orgulloso de Manhunter, estoy orgulloso de la adaptación de Alien, lo estoy de Thor, de los 4F. Hice una historia de Robocop/Terminator con Frank Miller que pienso que quedó muy bien".

Una idea clave en esta obra se encuentra en la anunciada confluencia de dos mundos, el de Robocop y el de The Terminator, en el sentido de que se convierten en interdependientes: la conexión del policía mitad humano, mitad robot, a las redes virtuales resultó determinante para que Skynet cobrara conciencia y se rebelara contra los humanos. El guionista también explota al máximo los viajes en el tiempo, de manera que se puede hablar de una guerra entre humanos y robots que se desarrolla, mayormente, con los saltos en el tiempo: cuando en el futuro gana un bando, en el último segundo en que va cambiando la realidad, un individuo o varios saltan atrás en el tiempo para cambiarlo de nuevo a favor de su bando. 

De este modo, contemplamos varios escenarios posibles en cuanto se altera algo del pasado por los que viajan en el tiempo: uno en que los humanos liquidan a Robocop antes de que impulse la conciencia de Skynet; otro en que los Terminator obligan a Robocop a cumplir su papel y que poco después éste replica su conciencia en un ejército para combatir a los enemigos de la humanidad; un futuro en donde las máquinas consiguen erradicar a los seres vivos en la Tierra (lo que hace preguntarme de nuevo por qué no usan armas bacteriológicas en vez de ejércitos robóticos) y empiezan a expandirse por el Universo (¿naves con el rostro de Terminator? Why not); otro posible futuro en donde los humanos viven en paz y en paisajes preciosos (optimismo puro y duro, mayormente, por el mal camino que vamos con el capitalismo salvaje y el calentamiento global)...Hasta que los autores se cansan de tanto salto en el tiempo y de sus infinitas posibilidades y deciden concluir la historia.

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