Dibujo y tinta: Jerome Opeña, Leonardo Manco
Color: Dean White, Chris Sotomayor
Contiene Wolverine: The Road To Hell y Uncanny X-Force 1-4 USA
Valoración: 7 sobre 10
Citas: -"Para eso está X-Force, buena gente que carga con el mismo mal rollo. No podemos sacárnoslo, así que lo dirigimos hacia la clase de sitios donde haga algún bien al mundo." (Lobezno)
-"Sé lo que hay dentro de ti. Pusiste un pedazo dentro de mí." (Warren)
Comentario: Cuando escribo estas líneas, ya he leído el cuarto tomo recopilatorio de esta serie titulado "Otromundo", que reúne consecuencias derivadas de este mismo tomo. Empecé mi andadura en esta serie en el tomo "La saga del Ángel Oscuro"el cual me enganchó al instante. Recuerdo que al principio, cuando veía esta serie en la estantería de mi tienda habitual me mostraba muy reticente a leerla por las connotaciones negativas que arrastraba para mí: el trauma provocado por Rob Liefeld impreso en el nombre de X-Force seguía siendo fuerte; a Lobezno lo tenía hasta en la sopa; y los integrantes del grupo auguraban un nada apetecible festival de gore y violencia gratuita. Sin embargo, Rick Remender ha podido trascender todo esto creando historias bastante bien cohesionadas, originales y sin perder fuelle en ningún momento. En su primera saga, el equipo se enfrenta a una misión imposible, que impulsa a sus integrantes a rebasar sus límites morales y cuya resolución resulta impactante para el lector.
La sociedad de fanáticos de Akkaba procura el éxito en el advenimiento de Apocalipsis, el líder mutante que llevará a la guerra para poder exterminar a los débiles y para que prevalezcan solo los fuertes, aunque el coste sea en millones de vidas. Los Akkaba se ocultan en unas instalaciones en la Luna, en la zona azul, custodiadas por los últimos jinetes: el monstruoso Guerra; Hambre, capaz de provocar un cáncer bioauditivo con el sonido de su tambor; Peste, que genera cientos de obedientes insectos por su boca, y Muerte, con el poder mutante de transmitir enfermedades terminales.
Todo parece indicar que se trata de una misión casi suicida para la nueva formación de X-Force capitaneada por Lobezno, financiada por Warren y cuya base secreta se encuentra en Arizona, dentro de una cueva. El resto de integrantes del grupo son iguales de duros y sanguinarios que los ya nombrados: el ilusionista Fantomex, el dicharachero mercenario Masacre y la telépata Mariposa Mental. Sin pensarlo demasiado, asaltarán las instalaciones de los Akkaba y, a pesar de las fatalidades que sufrirán ante los jinetes guardianes del resurgimiento de Apocalipsis, nada se puede comparar hacia donde les precipita la historia, para la que deberán adoptar una de las decisiones más controvertidas de sus vidas y que caerá, por ello, como una losa sobre sus consciencias, como se reflejará en los próximos números.
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