GRANDES AUTORES DE BATMAN: ALAN DAVIS - AÑO DOS

GUIÓN: Mike W. Barr

DIBUJO: Alan Davis, Todd McFarlane 

EDICIÓN ORIGINAL: Detective Comics núms. 575 a 578 USA, Batman: Full Circle USA y Batman: Gotham Knights núm. 25 USA

ECC / DC Comics

Precio: 17,95 euros

Valoración: 3 sobre 10

Citas: -"Vengo a proponer una tregua. Quiero vencer al Segador tanto como vosotros, pero por motivos distintos" (Batman)

-"Es la última pelea de mi carrera, pero el vencedor pienso ser yo" (Batman)

Reseña: No nos engañemos, lo único que merece la pena en este tomo es el dibujo de Alan Davis, un artista como la copa de un pino capaz de transmitir la intensidad emocional del momento en sus viñetas. En cuanto al guion, tenemos a uno de los Batman más disparatados de los que podemos encontrar en un cómic. Todo empieza a torcerse cuando el Hombre Murciélago sufre una derrota ante un nuevo vigilante en la ciudad de Gotham, llamado el Segador, y que no muestra piedad alguna ante los criminales ni nadie que se interponga en su camino. A partir de entonces, el guardián oscuro decidirá combatir el crimen convirtiéndose en un pistolero.

En el país de las armas, ¿cuál elegirá? Pues la misma pistola con la que asesinaron a sus padres. No acaba aquí la cosa, ya que para intentar detener al sanguinario Segador, establece una alianza con el hampa de la ciudad, con tanta fortuna que le asignan como compañero a Joe Chill, el asesino de sus padres. Batman traga con todo, pero ambos se encuentran destinados a enfrentarse en cuanto eliminen a una amenaza común. Y en la parte civil del héroe, Bruce Wayne querrá sentar cabeza con una joven a la que aparta de convertirse en monja.

Además, se añade una segunda historia a continuación de esta en la que el Segador vuelve a la carga. Ya no imaginamos qué otro despropósito se le puede ocurrir al guionista, pero lo consigue: potencia una de las peores ideas relacionadas con Batman, esto es, la del niño, alegre e impulsivo, que acompaña en su lucha contra el crimen en los bajosfondos con Robin. Se intenta cerrar el círculo con el asesino de sus padres.

Por último, tenemos una historia en la que Bruce Wayne aparece como un infiltrado en un bareto de poca monta en donde recaba información y le sirve para resolver casos. El excéntrico millonario se encuentra dispuesto a todo para mantener activa esta valiosa y peculiar fuente de información que constituye este punto de reunión distendido de la ciudad a la que acuden a beber los delincuentes.