Si muero antes de despertar...

The Mighty Thor número 343 

Título: Si muero antes de despertar...

Título original: If I should die before I wake...

Guion: Walter Simonson

Dibujo: Walter Simonson

Color: Christie Scheele

Valoración: 10 sobre 10

Edición española: Libro "Thor: La saga de Surtur/1". Planeta de Agostini (Forum)

Frases destacadas: -"Cabalguemos, mi señor Thor. Y que los bardos escriban sus baladas ¡Pues el eco de nuestras hazañas se oirá en todo Midgard, hasta las propias raíces del Fresno del Mundo!" (Eilif el Perdido)

-"Apenas parece reparar en mi presencia, Haag. Mira a su alrededor y tan sólo ve muerte. Loki tiene la culpa. Cuando llegue el momento, pagará por cada sonrisa que Balder ya no esboza ¡Y cómo lo pagará!" (karnilla)

Reseña: Simonson crea un nuevo personaje que le sirve de hilo conductor para los diversos temas que pretende tratar. Como hace con todas sus historias, relaciona la del último vikingo con el acontecimiento más importante de la etapa del autor, esto es, con el Ragnarok, ya que el destino final de aquél termina constituyendo un presagio de esta próxima hecatombe.

También lo utiliza para continuar definiendo el concepto puro y libre de tópicos y ambigüedades del heroísmo al que aspiraban los vikingos y, por extensión, el que representan sus deidades. Todos los personajes que introduce el autor reflejan el paradigma del héroe ideal. Si Bill Rayo Beta rompía el tópico del héroe perfecto y hermoso, Eilif el perdido desvincula el coraje de la juventud. Excelentemente caracterizado, empatizamos enseguida con el único superviviente de una aislada comunidad vikinga en el que sentimos su terrible pugna entre sus anhelos de gloria y el peso de los años, entre una fuerza de voluntad férrea y un cuerpo envejecido.

Sabiendo cercano su último aliento, Eilif desafió a sus dioses para evitar la deshonrosa "mala muerte" en el lecho. Thor acude a su llamada y le perdona su osadía porque reconoce en él el espíritu indomable de su antiguo pueblo al que creía desaparecido. Le concede una oportunidad para ganarse un lugar en su anhelado Valhalla, el dorado salón de los héroes, así que le nombra su escudero para que le ayude en la desigual batalla que le espera en New York.

Ese remedo de Godzilla, el dragón Fafnir, se ha percatado de su poder insuperable y se propone destruir la ciudad de los rascacielos si el dios del trueno no se presenta para un segundo y definitivo asalto. Odín y Thor bendicen al anciano último vikingo con su magia para tamaña hazaña, pero cuando el paladín de Asgard cae abatido por su gigantesco rival, la magia se desvanece y sólo contará finalmente para el mortal su valor y su compromiso adquirido con su dios en el combate.

En Asgard, Balder el Bravo continúa dudando de este modelo de héroe que constituyen los dioses asgardianos, ya que deja demasiada destrucción y muerte a su paso. Esto lo sabe muy bien desde que se reencontró con sus atormentadas víctimas en los dominios de Hela. El dios de la verdad ha cambiado profundamente desde entonces: reniega de la violencia, repudia su pasado, se exilia de sus congéneres, y acepta la hospitalidad de una adversaria, Karnilla, reina de las Norns, enamorada de él, pero que hasta ahora había rechazado porque, según sus propias palabras, "belleza y maldad" nunca le han atraído.

Por otra parte, sólo uno de los dos cuervos del Señor de Asgard vuelve de su peligrosa misión en los confines del universo, apenas vivo y perseguido por una sombra mortífera. Las nuevas que trae alertarán a los dioses de los siniestros planes de sus peores enemigos.